miércoles, 21 de diciembre de 2016






Pensándonos.
Soñándonos.
Buscándonos.
Sintiéndonos.
Deseándonos.
Amándonos.

lunes, 19 de diciembre de 2016

Temporal tras la ventana




La lluvia cae sin parar. 
Durante toda la noche, la oyes en el exterior. 
No consigues dormir, debido a la fuerza con la que golpea los cristales. 
En ese momento, en tu mente aparece una imagen. 
Te acurrucas, te haces un ovillo, te abrazas...
Eres consciente de tu soledad.
Y...te das cuenta de que tienes un sueño.

domingo, 18 de diciembre de 2016

El puzzle de tu vida

Siempre he pensado que la vida es un puzzle y que a medida que pasa el tiempo, este se va componiendo. Las piezas se van colocando poco a poco. A veces, cuesta un poquito encontrar las adecuadas, e incluso te equivocas al intentar encajar alguna de ellas en el hueco equivocado. 
En ocasiones, el puzzle de tu vida, ese que creías que estaba completo, o al menos, pensabas que ibas por el buen camino para completarlo, se cae de la mesa en la que lo tenías perfectamente colocado, de la forma más estable posible. La mesa se tambalea, el puzzle se cae y se descompone en las miles de piezas que ya tenías colocadas. 
En ese preciso instante, te desmoronas al igual que él. Te haces añicos. Y de repente, te das cuenta de que tienes que volver a empezar. Esa vuelta a empezar, te da mucho miedo. Los fantasmas, tus fantasmas, aparecen e intentan impedir que ese nuevo proceso de reconstrucción vaya adelante. Pero, tú, eres más fuerte que todos ellos. Te das cuenta, que estos sólo existen en tu imaginación, y que por supuesto puedes con ellos. 
Así que un buen día, una buena mañana, te despiertas con una sonrisa en los labios, con la sensación de que las piezas del puzzle de tu vida se están colocando tranquilamente, pero de forma segura, sin prisa alguna. Poco a poco has ido descubriéndote, reencontrándote, permitiéndote fluir, permitiéndote vivir sin planificar, disfrutando cada instante. Y es, en ese preciso instante, cuando lo que creías que no tenía sentido, cuando lo que creías que nunca pasaría empieza a tomar forma, empieza a ser una realidad. 
Y es que si crees... creas. 

Hablando con la mirada

Ayer me dijeron que mis ojos hablan. Es cierto. A menudo, me digo a mí misma que debería ser capaz de controlarlos. Debería de ser menos transparente de lo que soy. Pero, me resulta muy complicado. 
Dicen que los ojos son el espejo del alma. Y la verdad, en mi caso es cierto. Mis ojos me delatan. 
Debería de haber más gente como tú, me comentaron ayer. Gente transparente y sin dobleces, gente que hablara con la mirada. 
En este momento de mi vida, mi mirada habla. Mi mirada es capaz de contar como me siento, cuenta lo que siento... 
Y sí, me delata. No puedo evitarlo. Qué le voy a hacer. 
Ahora, refleja felicidad, tranquilidad, paz interior, seguridad...
Hay algo más bonito, que ser capaz de hablar sin necesidad de utilizar las palabras?. Hablando con la mirada...

jueves, 15 de diciembre de 2016

Energía

Algunos días tengo la sensación de que me falta el aire para respirar. 
En esos momentos, y a pesar de que salir a correr, no es una de las cosas que más me emocione hacer en este mundo, es lo que realmente me apetece. Cualquier espacio en el que me encuentre me resulta pequeño. 
Es una sensación de ahogo, de presión, de nerviosismo...Pero al contrario que hace unos meses, ahora esta sensación es buena. Tengo identificado el origen de la misma. Se me genera por un exceso de energía en mi interior. Un exceso de energía vital. Ahora, necesito canalizar esa energía, ya sea nadando, corriendo, saltando, bailando, e incluso escribiendo. Esta energía es generada por mis sentimientos, por mis sensaciones. Ayer, sin ir más lejos, me dijeron que yo, soy sentimiento. Esto es cierto, siempre ha sido así. Y sí, en alguna época de mi vida, la he controlado, eso no ha sido bueno para mí. Porque al final, si lucho contra lo que no soy, acabo cometiendo un error muy grande. Me transformo en alguien gris y triste y yo... no soy así. 
Ahora y después de un tiempo, consigo canalizar toda esa energía y transformarla en algo mayor, en algo que me permite sentirme más fuerte, más segura y que a la vez me permite mostrarme como soy.

lunes, 12 de diciembre de 2016

Sometimes

Hoy, me he dado cuenta de que todo es relativo. 
Todo se ve de forma diferente en función del papel que jugamos en cada historia. 
A veces verdugos, a veces víctimas.
A veces, engañamos; a veces nos engañan.
El punto de vista de cada uno es diferente. 
El papel que interpretamos es distinto. 
Así es la vida.
Sometimes, you win.
Sometimes, you loose.
Pero, aún con las pérdidas, también ganas.


domingo, 11 de diciembre de 2016

Domingo

Domingo, final de semana. 
Final de una semana densa, intensa, difícil. 
Tranquila, sentada en mi sofá, con la casa en silencio. 
Sintiéndolo. 
Dejando que me invada. 
Dejando que entre hasta lo más profundo de mi ser.
Me permito mi tiempo para leer, para reflexionar, para pensar.
Me doy cuenta de que lo que antes era explosión, ahora es reflexión.
Reflexión, revisión, análisis... todo con un sólo objetivo: crecer. 
Me doy cuenta de que poco a poco he sido capaz de ganar capacidad para interiorizar las cosas. Para hacerlas mías y transformarlas. He conseguido transformar el dolor en algo positivo, en aprendizaje. 
Hoy, domingo, me doy cuenta de que hace un año, no era capaz de reaccionar así. 
Hace un año, el dolor, mi dolor, hacía que no fuera viera más allá. 
Esta semana, ha supuesto para mí, un punto de inflexión en mi proceso personal. Pasó un acontecimiento, que hizo que mis miedos más horribles se me pusieran delante. Y esos miedos, que me paralizaron por un momento, consiguieron que fuera capaz de vencer otros temores, y que haya podido superar otros escollos con la mayor tranquilidad del mundo. 
Esta mañana, alguien me ha dicho que me veía genial, que en mi cara se reflejaba alegría y serenidad. 
Hoy, domingo, final de semana... de una semana dura, difícil, intensa...

sábado, 10 de diciembre de 2016

Dudas, temores y demás

Hoy, me cuesta concentrarme para escribir. Tengo varias cosas en la cabeza que me dan vueltas. Y lo cierto, es que cuando esto me pasa, es porque ya es hora de frenarlas, de pararlas y de aceptar que las ideas que hay rondando en mi interior,  las tengo bastante claras. Es hora de dejar a un lado las dudas, los temores y demás. 
A veces pienso que la seguridad genera inseguridad. Suena a paradoja, pero así es como lo creo.
El sentirme segura de mí misma, después de bastante tiempo en las trincheras, me genera dudas.  Piensas, que como puede ser que de repente, no seas la misma persona que eras hace un tiempo. Cómo puede ser que ahora seas la misma que hace unos años. 
A lo largo de estos meses he ido despertando de un largo letargo. Ayer, sin ir más lejos, le confesaba a alguien que tengo dudas y miedos, que no estoy tan segura como lo parece. Si bien es cierto, que lo que quiero lo tengo muy claro. 
Estoy desarrollando mi paciencia. 
Estoy aprendiendo a controlar mis miedos e inseguridades y a no permitir que estos me provoquen ansiedad.  
Estoy aprendiendo a caminar sin prisas, a disfrutar cada momento y por supuesto a dejarme sorprender. 
Pequeños pasos hacia adelante. Asumiendo riesgos. Sintiendo lo que me aporta cada momento. Caminando segura. 
Dejando a un lado, mis dudas, mis temores, mis... demás.